JAGUAR: REY DE LA SELVA MEXICANA

LOS SANTUARIOS DE LA PANTHERA ONCA / LUNES 24 JULIO, 94.9FM


Su presencia en los bosques, praderas y selvas mesoamericanas, hizo que el Jaguar -panthera onca- se convirtiera en un animal sagrado, un dios que inspiraba respeto y miedo al mismo tiempo. El poder y belleza del felino más grande de América, se transmitió a la mayoría de las culturas pre-hispánicas, y fue representado en cuanta expresión artística existía en ese tiempo. Durante el siglo pasado, el jaguar se convirtió en el estandarte de la conservación en México, al mismo tiempo que seguía siendo cazado por la belleza y alto precio de su piel.

La pantera, como también se le conoce al jaguar, está en la cima de la cadena alimenticia de los sitios donde habita, haciendo su presencia esencial para el equilibrio de la naturaleza. Su hábitat se pierde constantemente por la presión del desarrollo urbano y rural, y la imagen de este hermoso animal se hace cada vez más difusa. En la actualidad, el jaguar se encuentra "escondido" en pequeños santuarios donde aún es el rey de la selva, santuarios de selva y desierto en donde su rugido sigue imponiendo el orden, y donde su belleza sigue sobresaliendo del verde de la vegetación. Calakmul en Campeche, El Cielo en Tamaulipas, Sahuaripa en Sonora, los Chimalapas en Oaxaca y la desconocida Sierra de Vallejo en Nayarit, son los sitios que aún guardan el gran tesoro de México, el ser más venerado de nuestros antepasados y el bastión del equilibrio ecológico: la Panthera Onca, Jaguar.


La Sierra de Vallejo, en Nayarit, se prepara para recibir al primer jaguar criado en cautiverio que será liberado en su hábitat natural. El jaguar que aparece en estas fotos es Pier, de 10 meses de edad, y a solo dos meses de comenzar a convivir con los grandes adultos que dominan la selva.